SATÉLITES DE ENTRENAMIENTO, CANSAT
En sí, la temática
de este proyecto y del concurso al que fueron los alumnos de la Faculta de Ingeniería
de la UNAM, fue el crear un satélite de un tamaño pequeño, cercano al de una
lata (CANSAT, “Satélites enlatados”.
Explicaron un
poco y de manera breve como estaba hecho el satélite. Para el soporte del
mismo, se usaron tubos de aluminio, como parte del cuerpo un tubo de cartón
parecido al del papel aluminio, tela de paraguas para las hélices en forma de pétalo
y los sistemas eléctricos y mecánicos. La forma de las hélices en forma de pétalo
se debe a que el propósito era tener la mayor resistencia para tener una caída fructífera
para tener un video claro y muy bueno, el problema es que el nivel del mar en
México es de unos 1200 metros sobre el nivel del mar, y en Texas, donde se llevó
a cabo esta competencia está a más de 4000 metros sobre el nivel del mar por lo
tanto el video no fue bueno y la caída no fue la esperada. En esta conferencia
hubo anécdotas, la que destaco es que en una prueba el gancho que liberaba al satélite
se rompió, ya que era de acrílico y pues para solucionar el problema tuvieron que
ir a una tiendo y buscaron algo que podría suplantar al gancho, afortunadamente
lo hicieron y resultó todo un éxito, el gacho era de metal, de cobre. Otra prueba
para el satélite era proteger u huevo en todo momento, desde el lanzamiento
hasta el aterrizaje. El equipo universitario uso los principios de la disipación
de energía con globos, un saca-mocos y pegamento, y obviamente el tubo de
cartón, el resultado fue exitoso.
En el satélite
se usaron diversos sensores como; barómetro, giroscopio (para la aceleración), acelerómetro,
magnetómetro, LDR (una resistencia variable según la luz). También para no usar
tantos sensores se usó el IMU, sensor que contiene un barómetro, y acelerómetro.
“Mientras la
competencia iniciaba los primeros lanzamientos fueron espectaculares pero después
de varios fue aburrido”. Eso afirmaron los jóvenes estudiantes de la UNAM.
También nos contaron sobre las antenas que se usaron para registrar datos del satélite,
una parte fundamental es que Polonia uso una de unos 5 metros de altura, Italia
una antena tipo “pistola” y México no tuvo la necesidad de implementar una
medida enorme, la diferencia es que Polonia e Italia tuvieron que seguir a su
respectivo satélite para registrar los datos, lo irónico es que no lo
consiguieron, obtuvieron el video pero otros datos no, en cambio México uso una
simple antena hecha con un tripeé, junto con un tubo de PVC y la antena de unos
9 cm, alcanzando en si una altura de unos 2 metros. México obtuvo un gran resultado al poder registrar datos que Polonia
e Italia no pudieron.
En lo
personal esta conferencia no fue lo que esperaba, fue más allá de eso, me ayudó
mucho ya que pues esos chicos de la facultad reflejan el claro esfuerzo y las
ganas de salir adelante y lo único que hacen es aprovechar el hecho de pertenecer
a la UNAM.
Después de 10
meses de preparación, de trabajo y esfuerzo se vio recompensado ese esfuerzo
con un gran lugar en la competencia. El obtener un lugar 24 de 53 Universidades
del Mundo es un logro muy importante. Estoy chicos competían por primera vez.
En esa competencia eran LOS ÚNICOS DE HABLA HISPANA, LOS ÚNICOS DE
LATINOAMERICA. Estos chicos supieron hacer un papel increíble y respetuoso,
portaron con orgullo la responsabilidad de dejar en alto el nombre de México,
el nombre la Universidad Nacional Autónoma de México.
La última anécdota
de estos chicos fue muy padre. Al término de la competencia se tomaron fotos
con equipos de otros países, al estarse tomando la foto con Italia una persona
de la competencia les pregunto qué porque sus banderas eran diferentes, que
porque unas tenían un circulito negro y las otras no. Lo que no distinguió y no
sabía es que eran de distintos países y al saber eso la risa fue inminente y el
señor rojo se puso por la confusión. Estas cosas que pasan en estos lugares tan
importantes o competencias son vivencias únicas. Para mí, conocer a estos chicos
fue único y admirable.
“Puedo
aceptar el fracaso, todo mundo fracasa en algo. Pero lo que no puedo aceptar es
no intentarlo”
Michael
Jordan
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